La poeta de la luz

Me llamabas "la poeta de la luz"
porque siempre andaba haciendo fotos
con mi cámara.

Todas te gustaban.
Hasta los retratos que te hacía.

Te escribí
para poder nombrarte.

Tengo el cabecero de mi cama
forrado con aquellos retratos.

Hoy dejé mi cámara
y cogí una tiza blanca.
Dibujé un destello en mitad del cielo.

Me imaginé que yo iba dentro
del avión que volaba
dejando aquel camino blanco
sobre el fondo azul,
que viajaba para buscarte.

Viajaba hacia ti,
que tú estabas allí......

En ningún sitio ya.